El Ing. Zootecnista Fabián Morera, titular de la empresa de equipamiento Avige, dialogó con Cadenas de Valor por Radio Nacional de Concepción del Uruguay. Entre otras cuestiones, el profesional se refirió a la necesidad de incrementar las inversiones en el sector de producción de aves, especialmente en galpones de crianza.

-Cuál es la situación del sector de producción de aves en nuestra región?
“En principio debemos señalar que seguimos con frontera cerrada, con la problemática de no poder salir, en mi caso hace dos años que no salgo. Creo que a partir de noviembre las van a abrir, con su protocolo de seguridad. Esta situación afecta bastante porque hay retrasos mayores en Aduana, hay menos frecuencia de fletes marítimos, entre otras cuestiones. Hice una importación de España en junio y me llegó la semana pasada, con una demora de noventa días porque hacen escala y cambian de barco, trasbordan y todo eso. Así que un viaje de veinte días o veinticinco se transformen en noventa días, cuando te cambió la estación del año”.
“Necesitaba ese material para invierno, está llegando sobre la entrada de la primavera, donde las necesidades de los productores apuntan ya pensando en el calor, en el verano, en extractores, en foger, mejorar su sistema para afrontar el verano más que nada y el estrés calórico, pero bueno, dentro de todo se pudo operar con las solicitudes de pedidos de importación. Por otra parte, no hay líneas de crédito que apunten a que el productor pueda renovar su equipamiento, está quedando casi obsoleto debido a que la mayoría del equipo fue repuesto entre los años noventa y seis y dos mil cinco. Estamos hablando equipos de quince veinte años, donde la mejora genética en la avicultura se nota año a año y en quince años prácticamente hay un pollo diferente, cuando tenemos tecnología que en su momento era óptima. Hoy el animal está quedando fuera de las necesidades y requerimientos de agua y de alimentación”.
-Las herramientas de financiamiento parecen no alcanzar a cubrir los requerimientos de los productores en materia de inversión…
“La Sociedad de Garantía Recíproca es una herramienta en contacto con los bancos, sean provinciales, nacionales o privados, que son los que crean la partida, el monto de dinero para otorgarlo a producción avícola o de cerdo o ampliaciones, que son tres líneas específicas creadas con un fin, en la cual tienen un plazo de pago que puede ir de un año a cinco años, con algún periodo de gracia. Pero estamos hablando de tasas que, a pesar de que son en pesos y a una tasa que puede considerarse baja comparada a la inflación, tampoco están realmente operativas. O sea, hay SGR que están solicitando presupuesto para sus socios y no están logrando el acuerdo entre el banco, la línea de crédito y su aval para su con su socio”.
-Recordemos que la Sociedad de Garantía recíproca es una herramienta financiera creada para mediar entre los productores y las instituciones bancarias, en este caso haciéndose cargo de una responsabilidad que baja el riesgo en la toma de este crédito…
“Sí, la primera SGR fue nacional, la creó el Banco Nación y después cada empresa en su debido momento fue creando la propia Sociedad de Garantía Recíproca. Creo que la pionera en Entre Ríos fue Vínculos, de la empresa Las Camelias. Sus integrados hacían un aporte único en dinero como para hacerse socios. O sea, es una amalgama de dos tipos de empresas, cumple función de cooperativa y se comporta en el mercado como una sociedad anónima. Luego Granja Tres Arroyos creó Confiables, con la idea de avalar operaciones de compra para, en este caso los integrados”.
-Esto siempre con un fin específico, ya sea mejoramiento de equipos o incorporación de nuevos…
“Eso lo determina el banco que ofrezca el crédito, la línea. En medio está la sociedad de garantía recíproca entre el banco y el productor avalando la operación”.
-¿Qué evolución tuvo el equipo de calefacción con pellet de madera?
“El sistema de calefacción a pellet, un subproducto de la fabricación de muebles y la industria forestal, que deja aserrín y viruta. Eso se comprime y se hace un pelletiazado. Se logra un producto que tiene muy buena combustión, muchas calorías, con muy baja humedad y está considerado un producto de energías renovables porque está usando un subproducto. Este es un sistema que lo que ha logrado es conseguir una muy buena calefacción dentro del recinto donde se emplea. Como muy buena oxigenación con muy poca humedad dentro de la madre y con un bajo costo de calefacción de más del 50%, comparado con lo tradicional en las granjas, actualmente sistemas de calefacción por radiación infrarroja, con radiadores que trabajan con gas”.
“Y el gas sigue siendo muy caro. Comparativamente son dos sistemas que funcionan, ahora, por un tema de costo beneficio, el gas tiene un costo elevado para las empresas que se los dan a los integrados. Creo que hoy en invierno gasta más de 10 pesos por pollo alojado. Esta nueva alternativa permite con ese ahorro del cincuenta por ciento más que se te reduce para lograr una calefacción igual o superior, poder esa plata destinarla a invertir en este nuevo sistema es automático, no requiere que alguien lo asista colocando pellet. Siempre es dual tiene una opción a leña en el caso que no llegase a haber pellet, por un problema de suministro más que nada. El pellet hoy en día viene de Misiones, entonces tiene una logística compleja y el ahorro de 50% es con un flete desde Misiones, ó sea que si lográramos que se desarrolle en una industria dentro de Entre Ríos, donde hoy la mayoría se quema, podríamos abastecerla para que haga el pelletizado”.
“Creo que el poco desarrollo de este nuevo sistema de calefacción se debe a la provisión de pellet necesario para que funcione, porque las empresas al norte exportan mucho, más del ochenta por ciento fuera el país y fabrican algo para el mercado local. Hay algunas empresas que tienen este sistema de calefacción primero probándolo, otros ya lo tienen muy probado, ya han decidido volcarse por este nuevo sistema que genera aire caliente exceso oxigenado dentro de la madre, en contraposición con el radiador que genera un calor localizado en el piso. Y como residuo genera dióxido de carbono y vapor de agua, con cielorraso mojado y hay que trabajar mucho la ventilación de la cama con muchas horas de laboreo, genera cascarones en la cama un poco más de garra y esto provoca callos que desmerecen su calidad. Funciona fuera del galpón, solamente ingresa aire caliente que viene de afuera. Incorporado a la madre y dejando un ambiente muy adecuado con temperaturas óptimas y con una merma muy grande el costo de combustible”.
-¿Cómo ves la situación en general en las granjas?
“Creo que un poco lo que se vio este año con el problema sanitario que tuvieron todas las empresas del sector en sí, con la Hepatitis y que sigue estando, no es un problema superado, espero que la vacuna, en cualquier momento esté ya disponible como para que las empresas y los productores dejen de padecer ese exceso trabajo y obliga a trabajar mal. Pero lo que sí se visto es que con una buena calefacción y buena ventilación controlada puede avanzarse mucho, ya que la mayoría de nuestros galpones son de ventilación natural.
En el caso del horno a pellet ha logrado un ambiente más adecuado, a pesar de que la enfermedad esté presente. Es como que cursa con una menor mortalidad y tiene una posibilidad de recuperación mejor del ave. Creo que una inversión que se viene, más que nada porque la genética lo está demandando, es mejorar mucho la ventilación invernal, controlando a través de un sistema computarizado iguales a los que se manejan en verano. No se ha dado mucha importancia a la ventilación invernal porque cuando uno calefacciona, ventilar significa enfriar, entonces hay que lograr el punto justo en el cual se oxigene adecuadamente al ave porque los que tienen gas están consumiendo oxígeno, están generando vapor de agua y todo eso hace un ambiente enrarecido dentro del galpón. Hoy la genética está demandando sistemas de ventilación de verano y los sistemas de invierno para tener siempre un ambiente adecuado, optimo, controlado”.
-La importancia del equipo funcionando correctamente ha ido creciendo a lo largo de los años…
“Los proveedores de equipo, como cualquier proveedor importante, habla con los genetistas para ver esa línea genética qué resultado tendrá en el mediano plazo. Desarrollar un producto lleva cuatro o cinco años, testearlo, probarlo, para tener un equipo con tecnología para el pollo del futuro. En el momento que sale al mercado está desarrollado y es adecuado para el pollo de ese momento, porque si uno fabrica en base al pollo actual, cuando pasan diez años el equipo terminan quedando obsoletos.
Si el animal no come bien, no produce bien, puede tener problemas. Cualquier problema sanitario es productor de alguna debilidad y el animal no convierte bien. Por eso es importante que hoy, si hay líneas de crédito, sean para la renovación de esa tecnología que hoy está casi obsoleta”.
-En términos de presupuesto, ¿cuánto cuesta hoy montar un galpón de ciento cincuenta por doce?
“Dependerá qué tecnología queremos tener dentro del galpón. Si quieren un ambiente controlado, o tenemos un galpón convencional. Eso implica en la inversión de equipamiento interno en entre cincuenta y setenta y hasta noventa mil dólares, prácticamente el doble. Y bueno, en cuanto a estructura tienen una inversión, si es madera, similar, o sea cincuenta mil dólares. Llevamos estructura metálica y un treinta o cuarenta por ciento más caro. En resumen, el mejor galpón costaría 200.000 dólares, el galpón convencional 100.la mitad”.